El año pasado fui de oyente a una clase introductoria a la Psicoterapia Humanista/Transpersonal; esta clase era impartida por tres profesores, y había uno, uno en especial, que tenía una forma muy especial para referirse a ciertas cosas, específicamente cuando tenía que dar ejemplos concretos en la terapia de los enfoques que en esa clase estaba pasando.
Este profesor, cuando ejemplificaba, por ejemplo, el momento específico en que uno de sus pacientes se conectaba -se daba cuenta- con emociones conflictivas, y podía trabajar con ellas, lo hacía de la siguiente forma: "entonces el paciente se da cuenta de toda la tristeza que tenía guardada, y entonces fffffffffffffffffffffffff". La cosa es que cuando hacía eso, como que botaba aire por la boca, así como soplando fuerte, como desinflándose, y se refería, no se pues, así como ese sentimiento de liberación, como de dejar ir tal vez... cuando lo hacía le salía divertido, además que el señor es shuper loco ashí, pero igual se le entendía.
Cuento esto porque me pasó algo parecido cuando escuché el nuevo álbum de Sigur Rós, algo así como liberador, lindo, sanador casi, no sé... ahora fui yo el que hizo "ffffffffffffffffffffffffff".
Lo recomiendo profundamente, escúchelo, con la luz apagada, con una vela al lado, viajando hacia el mar, al lado del mar, caminando por la ciudad, arriba de un cerro, arriba de un auto, cuando tenga pena, cuando esté cansado, cuando esté despierto, cuando sienta ternura, cuando sienta que el día no da para más, cuando quiera creer en dios, camino a la U o a la pega, para leer, etc etc...
Si no es pirata, escúchelo online aquí.
"With a Buzz in Our Ears We Play Endlessly"
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