Un escrito pendiente para Esteban.

Tenía pendiente dedicarte unas palabras aquí, y ahora puedo hacerlo. Me es un tanto difícil escribirte esto, en primer lugar por que nunca pensé que iba a llegar a hacerlo bajo estas circunstancias, y por otro lado por que si bien compartimos muchos momentos juntos, nunca llegué a conocerte en profundidad, de repente daba por hecho que con el tiempo habríamos podido llegar a ser buenos amigos, o por lo menos llegar a platicar ratos mucho más prolongados.

Te conocí hace aproximadamente un año, en "la Corpo". Te conocí como coordinador del programa que hasta el día de hoy soy parte (aunque a veces más ausente que presente); alto, un poco gordito, tranquilo... a veces tímido. Debo reconocer que me llamó mucho la atención el día en que me contaste que eras fan nª1 de Star Wars, de hecho, te molesté con que eras nerd y muy ñoño, jaja, no me respondiste nada, supongo que te molestaste.

Recuerdo también esa costumbre que tenías de llegar extremadamente tarde, como esa vez en que nos tocó hacer un ciclo de Conversación juntos, y cuando hacíamos difusión solías dejarme esperando a veces hasta casi una hora a que llegaras... muchas veces me molesté, pero al final no te decía casi nada ya que muchas veces yo había hecho lo mismo. Con entusiasmo organizabas distintas cosas que contribuyeran a un mayor conocimiento y educación para la comunidad gay; más de una vez me invitabas a los ciclos de cine que tanto te gustaba organizar, y con un tono entre de serio y entre de broma reprochabas mi ausencia a tales (de hecho, por x circunstancias nunca pude ir a dichos ciclos), con alegría hacías tus power points sobre homosexualidad e historia, y luego contabas lo exitosos que habían sido.

Esteban, tengo que ser muy sincero contigo. Tu bien sabes que nunca fuimos taaan amigos, vuelvo a repetirlo, pero la noticia de tu partida me afectó, me dejó en shock... no entendí por qué. Te recordé en el único lugar que nos unía: la Corpo, te recordé siempre sonriendo, te en recordé en la última vez que nos vimos, donde orgulloso me mostrabas tu "nueva oficina", y luego me regalabas un tarro con galletas por la labor de corrdinación; me di cuenta del afecto y aprecio que sentía hacia ti, y por otro lado lamenté no haberte conocido más ¿por qué esa humana tendencia de dar por hecho al otro cuando uno sabe que está por ahí rondando?

Yo sé que la forma en que decidiste partir no es la mejor, de hecho, es muy probable que tu familia y tus más cercanos demoren mucho en sanar el duelo (así que de pasadita, donde quiera que estés, cuidalos y mándales energías); pero, en ese momento sentiste que esa era la mejor opción para apaciguar tu pena, calmar tu angustia, y tranquilizar tu alma... y ahora, donde quiera que estés, deseo de todo, pero de todo corazón que hayas encontrado esa paz y esa felicidad que tanto te costó encontrar en este mundo.

Parte en paz, niño Star Wars, parte en paz, activista de corazón, historiador. Habían tantas cosas que por acá se hubieran podido hacer para secarte esas lágrimas que tanto escondías, pero se comprende también que muchas veces dichas lágrimas son tantas que tienden a inundar el resto de las salidas.

Descansa en paz, eventualmente nos encontraremos.

(http://enmovimientoestaelfuturo.blogspot.com)